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Un tema que me gustaría tratar más profundamente en el blog (espero hacerlo en breve) es el de las habitaciones infantiles... cuando dejan de serlo. Cuando los niños se van haciendo mayores, pero siguen siendo niños, se impone un cambio en sus gustos, y su habitación con ositos y cenefas pastel queda obsoleta. Este momento suele coincidir con la comunión o en una edad aproximada, y supone un dormitorio de transición hasta que el niño o la niña se convierte en un adolescente (y ahí, sálvese quien pueda).
Pues bien, este dormitorio, creado por las hermanas que están detrás de Bonnesoeurs, tiene los ingredientes básicos que una remodelación de dormitorio infantil a prejuvenil tiene que tener: espacio para ellos (una niña en este caso), personalidad a raudales, un espíritu alegre y desenfadado más "de mayor" y, por si fuera poco, es asequible y fácil de conseguir, muy inspirador, que es lo que nos interesa por aquí.
A tener en cuenta el binomio rosa y rojo, ese rosa que hace dulce la zona de dormir, y ese rojo que actualiza un antiguo pupitre y hace vibrante la zona de estudiar.
No soy muy fan del washi tape, pero reconozco la virtud que tiene aquí para conseguir que, en un momento, las fotos de las amigas, las entradas de aquel concierto, etc. formen al instante una galería de arte en la pared.
¿Qué os parece esta habitación no tan infantil?
Original article and pictures take ministryofdeco.blogspot.com.es site
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